Cómo enseñar a los niños a utilizar el baño

¿Cuál es el momento ideal para que los niños dejen el pañal? ¿Cómo ayudarles y qué pasos deben seguirse para que se adapten con éxito al uso del baño?
No existe una edad concreta para que los niños aprendan a utilizar el inodoro. Aunque la mayoría lo suele hacer entre los 2 y los 3 años, cada niño tiene su propio ritmo de maduración y aprenderá cuando esté listo. En cualquier caso, es importante no forzar ni presionar al niño, ni agobiarse si tarda más de la cuenta.
Algunas señales pueden indicar que tu hijo ya está listo para aprender a utilizar el baño . Hay que estar atento a los siguientes indicios:
  • No moja el pañal en dos o tres horas seguidas.
  • Es capaz de permanecer sentado al menos 2 o 3 minutos.
  • Hace una pausa breve durante la actividad que esté realizando para orinar.
  • Parece incómodo con el pañal e intenta quitárselo, o prefiere estar desnudo o usar ropa interior.
  • Busca a un adulto cuando está sucio o ya expresa, con gestos o verbalmente, que necesita ir al baño.
  • Es capaz de vestirse y desvestirse solo y distingue las diferentes partes del cuerpo.
  • Otras señales similares que detectes.
Consejos para facilitar que el niño se adapte al uso del inodoro:
  • Juega con tu hijo a sentaros en el inodoro, incluso sin pañal y con los pantalones bajados, durante unos minutos. Después, lávale las manos, para así adquirir unas rutinas y una regularidad.
  • Adapta el inodoro para que el niño lo pueda utilizar (adaptador, elevador antideslizante, etc.) o compra inodoros infantiles. Los tendrán más a mano y facilitarán su aprendizaje.
  • También se puede educar a los pequeños a través de libros ilustrados y videos que expliquen de una forma divertida cómo utilizar el baño, o con la ayuda de muñecos que beben y se mojan, etc.
  • Viste al niño con ropa cómoda y fácil de quitar para facilitarle ir al baño.
  • Es importante avisar a los niños de que van a ir sin pañal durante el día, para que lo tengan en cuenta. 

Pasos del proceso de aprendizaje

En la primera fase del aprendizaje, es importante ayudar al niño a habituarse al uso del inodoro. Para ello, primero es aconsejable sentarle vestido durante unos minutos (lo podemos entretener con un cuento o con su muñeco preferido), y decirle que a partir de entonces lo utilizará para orinar o deponer.
Cuando ya observes, después de un tiempo, que ya permanece sentado en el inodoro durante unos minutos, acostúmbrale a que lo haga desnudo y varias veces al día, para que se vaya sintiendo cómodo. En algún momento de este proceso, el niño finalmente hará sus necesidades en el inodoro.
Cuando ya vaya al baño de forma regular y prácticamente no ensucie el pañal, se pasa a la segunda fase. Hay que tener en cuenta que primero se debe quitar el pañal de día y, sin que pasen más de 15 días, se retirará el de noche.
Tras quitarle el pañal de día, es fundamental no volver a utilizarlo nunca más, ni en casos excepcionales como un viaje, ya que el niño puede llegar a confundirse. También, se le debe invitar a ir al baño cada hora u hora y media, siempre de forma positiva, y vigilar las señales que pueden indicar que necesite utilizar el inodoro (cruzar las piernas, bailoteos, etc). Es normal que las primeras veces no llegue a tiempo al baño. En este sentido, es importante felicitar a tu hijo siempre que utilice el inodoro correctamente, y ser comprensivo si no llega a tiempo (presionarlo puede ser contraproducente).
Cuando el niño no se haya mojado durante el día (normalmente, una semana sin pañal es suficiente para coger el hábito), será el momento de retirar el pañal de noche. Es recomendable animar al niño a que vaya al lavabo justo antes de ir a dormir e intentar que no beba mucho líquido las horas previas. Es normal que los primeros días se levante mojado, pero, poco a poco, se acostumbrará a aguantarse y a utilizar el baño siempre que lo necesite.
Referencias bibliográficas:
Sobreviviendo al entrenamiento del uso del bañoChild Welfare Information Gateway , 2013 [acceso: 11 de febrero de 2013]. 
Aprendiendo a ir al bañoFundación Salud Infantil , 2013 [acceso: 11 de febrero de 2013].


El dibujo lo ha hecho mi nieto Guillermo.

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