Muchos de los niños que sufren TDAH tienen dificultades escolares que requieren un tratamiento educativo específico. Pero no por ello vamos a privarles de una educación normalizada. Los alumnos con TDAH necesitan todo nuestro interés, apoyo, paciencia, pedagogía y didáctica para encontrar la mejor manera de que aprendan tanto contenidos curriculares como habilidades sociales y valores morales.
A continuación se proponen unas medidas para tratar a los alumnos con TDAH para un mejor rendimiento académico:
- Lugar estable y controlado dentro del aula. Siempre delante y cerca del profesor para no distraerse.
- Dar información personalizada y concreta. Cambiar el énfasis en el discurso para mantener la atención o captarla, escribir en la pizarra las palabras clave para focalizar la atención y modificar el centro de atención.
- Buscar actividades con movimiento. Darle tareas con movimiento, hacer recados dentro del colegio, borrar la pizarra. Si el niño es mayor y es capaz de reconocer el estado de inquietud y necesita salir del aula, se puede acordar con él que sin pedir permiso pueda abandonar la clase 5 minutos y dar un paseo.
- Incentivar la participación en clase. Uso de experiencias prácticas para el aprendizaje. Exponerle a situaciones en las que vaya a tener un buen desempeño para fomentar su autoestima.
- Elaborar guías atractivas para seguir el desarrollo de las tareas. Por ejemplo, pueden ser hacer un comic, fotogramas con los pasos o escribirlos.
- Ayuda externa no adulta y cooperación con un compañero más eficiente.
- Evaluaciones personalizadas según las características del alumno. Suelen necesitar más tiempo para acabar las tareas, por lo tanto se les puede alargar el tiempo o modificar el examen. También puede ayudarles subrayar la idea principal de los enunciados y espaciar las preguntas.
- Motivar el rendimiento escolar a través de intereses propios. Por ejemplo, si tiene que practicar la redacción que elija el tema.
- Diversidad de recursos. En la medida de lo posible presentar el material con colores vivos, usando diferentes recursos como libros, ordenador, pizarra, audios, películas…
- Comunicación bidireccional y regular con los padres del alumno para tener un seguimiento de la evolución, cambios y ajustes en los tiempos de trabajo.
Actualmente contamos con muchos recursos materiales, información, profesionales dentro del centro educativo y fuera de ellos para encontrar la metodología e intervención adecuada para los alumnos con TDAH.
¡Usemos todos esos recursos!
Violeta Peláez, pedagoga y terapeuta en Red Cenit
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