Trucos para no perder la paciencia con los niños




La paciencia es vital, porque cuando nos dirigimos a los niños estos necesitan ver que estamos absolutamente convencidos de lo que decimos y que por ese mismo motivo somos capaces de decirlo serenos, sin perder los nervios. Además, nos permite mantener una conexión profunda y significativa con nuestros hijos y hacerles ver que perder las formas nunca es el camino adecuado. Pero a veces es difícil ser paciente cuando los hijos lo cambian todo de sitio y no devuelven nada a su lugar, cuando intentan coger todo en el supermercado, cuando rompen uno de nuestros objetos de la casa favoritos, cuando no quieren comer…y es especialmente difícil cuando ya hemos acumulado mucho estrés o angustias previas por el trabajo o cualquier otro problema familiar. Y es esa dificultad la que hace que perdamos los nervios, que explotemos, que peguemos gritos…y que al final nos sintamos mal por no haber sabido comportarnos ante los más pequeños, repitiendo eso mismo que a ellos les reprochamos.

 

La crianza de los hijos es complicada, y eso nadie lo duda, pero debemos procurar minimizar nuestras presiones diarias y nuestro nivel de estrés, para que no sean precisamente los niños los que nos hagan estallar, ya que son los que más cariño y buenas palabras necesitan. Además, no podemos olvidar que los niños también luchan continuamente contra sus emociones, que aún no son capaces de manejar, y de poco servirá decirles que deben hacerlo si luego observan cada día que los adultos tampoco son capaces de enfrentar ni controlar las suyas propias.

Debemos darnos cuenta, por tanto, de la importancia que tiene el estar en sintonía con las emociones de los más pequeños, ayudándoles a calmarse y a desarrollar habilidades y valores tan importantes en la vida como la empatía. Los niños pequeños no tienen el cerebro y el sistema nervioso aun totalmente desarrollado, por lo que para ellos comportarse adecuadamente o mostrar madurez emocional puede ser algo todavía muy complicado, casi imposible. Por eso los padres deben servir como modelos y mostrar el camino a sus hijos de la calma y de la resolución de problemas en paz. Esa paciencia, además, es la que hace que los niños se sientan seguros y aprendan a tener autoconfianza e interés por hacer las cosas cada día mejor.

Pasos para lograr mantener la paciencia con los niños

 

  • Esto no solo te pasa a ti

Es importante que siempre tengas en cuenta que esto no solo te pasa a ti y que les sucede a todos los padres del mundo. Además, el ánimo que se tenga justo en ese momento influirá mucho también en tus reacciones. Si has tenido un mal día, no trates de dártela de súper mamá o papá y relájate, que tú también te lo mereces.

 

  • Aléjate por un momento

Si ocurre algo que te saca fuera de tus límites, simplemente aléjate de la escena por un momento sin decir nada. Dirígete al baño, por ejemplo, y aléjate durante 5 minutos, lávate la cara y cuenta hasta diez. Vuelve solo después, cuando ya hayas encontrado de nuevo la calma y tu respiración sea normal.

  • Empatiza con la frustración de tus hijos

Presta toda la atención del mundo a tus hijos, aunque estés haciendo algo justo en ese momento. Ellos se sienten frustrados cuando no consiguen lo que desean y eso hace que se comporten mal o se salgan de los límites, pero salirse con la suya nunca debe incluir el ser o no escuchados, pues esperan de ti que les ayudes a encontrar esa calma perdida.

FUENTE:


https://blog.bosquedefantasias.com/

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