¿A partir de qué edad es recomendable que hagan deberes en
casa?
Bajo mi punto de vista, desde el primer momento, aunque
con graduación de tiempo y de tipos de tareas.
- En edad
preescolar los deberes consistirán en enseñar y explicar trabajos
hechos aquel día, una o dos veces por semana.
- En
los primeros cursos de la educación primaria, podrán ser tareas
diarias que no ocupen más allá de media hora diaria y que sean de tipo
rutinario. Es recomendable que el padre o la madre ayude al hijo a planear
la tarea, a organizar el material, etc. Una vez iniciada la tarea,
conviene que permanezca en la misma habitación pero haciendo algo
diferente, no mirando directamente lo que hace su hijo. De vez en cuando
puede hacer alguna sugerencia o ayudarle a centrar la atención.
- En
los últimos cursos de primaria y primeros de secundaria puede
aumentarse el tiempo hasta una hora e incluir algunas actividades de
estudio. En esta etapa, nuestro hijo debería tener un lugar específico
para trabajar. La participación de los padres, en este momento, ha de ser
discontinua, es decir, no permanecer en la misma habitación pero entrar y
salir de vez en cuando, comprobando lo que hace y haciéndole algún
comentario.
- En
la educación secundaria podrán ser actividades que exijan más
esfuerzo personal y relacionadas
con el estudio; también podrá alargarse el tiempo hasta la hora y media o
dos horas diarias como media. Al final de la educación secundaria bastará
con asegurarse que cumple con el horario pactado y que usa el tiempo de
estudio para tal finalidad.
Como vemos, la participación de los padres en los deberes
también ha de ir acomodándose a la edad de los hijos. En los primeros años
escolares los padres pueden ayudarles a planificar la tarea, a prever cómo
hacerla, a valorarla, a perseverar con atención. Es decir, llevarlos de la
mano, estar cerca de ellos mientras trabajan. Luego, a medida que se van
haciendo mayores y más autónomos, ir dejándolos solos, en su cuarto, pero
visitándolos mientras trabajan y comentando las dificultades o los logros.
He dejado para el final intencionalmente, para que sea la
última idea que quede en la mente del lector, la que considero más importante: el
seguimiento de las tareas escolares de los hijos es importante que lo hagan el
padre y la madre, no sólo la madre. Precisamente, el hecho de que
participen los dos en ello dará a los estudios de los hijos el rango de asunto
muy importante y, como consecuencia, generará en ellos motivación suficiente
para el esfuerzo. Por desgracia, es bastante frecuente encontrar una relación
directa entre fracaso en los estudios y desinterés de los padres por las tareas
escolares.
José María Lahoz García
Pedagogo (Orientador escolar y profesional),
Profesor de Educación Primaria y de Psicología
y Pedagogía en Secundaria
Pedagogo (Orientador escolar y profesional),
Profesor de Educación Primaria y de Psicología
y Pedagogía en Secundaria
No soy padre si no abuelo y posiblemente no tenga entrada en este blog. Y con vuestro permiso quiero decir mi opinión sobre los deberes. Un día tiene 24 horas, un niñ@ duerme la gran mayoría de 9 a 11 horas, si le quitamos la media 10 h. quedan 14 horas, restando las 7,5 de estancia en el colegio (los que se quedan a comer) quedan 6,5 h., menos las actividades extraescolares que le puedan gustar 2 horas quedan 4,5 h. si le restamos viajes, aseo, almuerzo, cena, relación con familia etc. etc. 3 horas, le queda 1,5 h.
ResponderEliminarPodéis ser profesionales de la enseñanza; pero no estoy de acuerdo, cuando se habla de deberes en casa, no consideráis que es suficiente con las horas lectivas... O es... Por qué no se cumplen los objetivos impuestos por enseñanza...! La culpa... De las horas que se pierden en clase, entradas, salidas, huelgas, enfermedades, fiestas, etc. etc...! (Estoy hablando de enseñanza primaria).
Mis hijas, 30 años atrás no hacían deberes por estar prohibido por la ley de enseñanza que se cumplía en su colegio (de aquellos tiempos) y son dos personas inteligentes y con sus estudios y tenían tiempo de jugar (cosas de niñ@s) y vivir, algo mucho más importante que sólo pensar en los deberes.
Hoy los niñ@s son autómatas no tienen tiempo de ser niños, todo el día ocupado con obligaciones..., dejarles tiempo al día para que sólo sean niñ@s...! Y aprender de la escuela Finlandesa que nos pueden enseñar muchas cosas...!!! L'avi Manel